Hola de nuevo, ¿qué tal estáis? Hoy hablamos sobre un tema nuevo que os permitirá adquirir más vocabulario. En esta ocasión hablamos sobre plantas. Creo que hay pocas personas a las que no les gusta tener una planta en el exterior o en el interior de su casa. Este podcast se lo dedicamos a Irene que nos escucha desde Alemania. Irene es una oyente habitual de SpanisPodcast.net que en ocasiones nos enseña las fotos de su jardín.
Si os gustan las plantas, lo que vamos a deciros ahora, os va a resultar familiar. Sin embargo, otras personas (entre las que nos incluimos nosotros mismos) no sabemos bien cómo cuidar una planta para que se desarrolle plenamente.
Todas las plantas necesitan unos cuidados generales para que puedan crecer en perfectas condiciones, tanto las que están plantadas en una maceta, como las que están plantadas sobre el suelo. A continuación os contamos cuáles son los cuidados básicos necesarios para que una planta pueda crecer de forma adecuada. Antes de nada, comenzaremos a hablar sobre su desarrollo.
Desde el momento en el que plantamos una semilla y ha germinado, se inicia su crecimiento. Para poder crecer, las plantas necesitan alimentarse. Para ello:
- Primero: Absorben el agua y las sales minerales que hay en la tierra a través de sus raíces.
- Segundo: Hacen circular el agua y las sales minerales que han absorbido para que lleguen a las hojas. El tallo es el encargado de desplazar el agua y los minerales desde la raíz hasta las hojas.
- Tercero: Realizan la fotosíntesis. La fotosíntesis es el proceso que utilizan las plantas para producir su alimento. Ésta tiene lugar en las hojas que es la parte donde fabrican el alimento. Cuando el agua y las sales minerales suben hasta llegar a la hoja, se mezclan con el dióxido de carbono y se produce el alimento. Para que esto funcione, la planta necesita la energía que le da el sol. La clorofila es la encargada de absorber la luz solar para que se produzca la fotosíntesis. El color verde de las plantas se debe a la clorofila.
- Cuarto: De una manera similar a cualquier otro ser vivo, necesitan respirar. Las plantas respiran continuamente para tomar oxígeno del aire. Gracias a la respiración las plantas pueden tomar oxígeno y expulsar dióxido de carbono.
¿Cuáles son los cuidados generales que tenemos que proporcionar a las plantas?
Cada cierto tiempo hay que realizar una limpieza y mantener a la planta sin hojas y sin flores secas. Asimismo, es importante eliminar el polvo que se acumula sobre ellas para conservar su salud. Una mala limpieza hace que la planta se vea fea y facilita que haya algún ataque de plagas o enfermedades. Si observas que hay manchas oscuras en la planta, puede ser síntoma de que hay una plaga que le está haciendo daño. Una plaga es un grupo grande de insectos o animales que causan daño.
Para quitar el polvo de las plantas puedes coger un trozo de algodón o una esponja humedecida con agua y pasarlo por encima de sus hojas de forma suave. Existen algunas plantas a las que no se les pueden limpiar las hojas con agua porque se llenan de hongos. En ese caso puedes utilizar un pincel para eliminar el polvo.
Iluminación para las plantas
La luz es un elemento necesario para la vida de las plantas porque gracias a ella realizan la fotosíntesis. No todas las plantas precisan la misma cantidad de luz. Hay algunas que necesitan mucha cantidad de luz y otras que con muy poca pueden mantenerse en perfectas condiciones. Es bueno que todas las plantas, incluidas las que tenemos en el interior de nuestras casas, reciban luz natural durante unas horas al día. Dejarlas directamente al sol durante demasiado tiempo puede hacer que se deterioren.
El exceso y la falta de luz ocasionan problemas en las plantas. Demasiada luz ocasiona la pérdida del tono verde en las hojas. Cuando la planta recibe menos luz de la necesaria, la planta se ve frágil y sin vida.
Regar las plantas
El agua es imprescindible para que las plantas se mantengan en buenas condiciones porque gracias a ella pueden absorber de la tierra los nutrientes que necesitan para vivir.
Es muy importante elegir las horas adecuadas para regar las plantas. En el caso en el que tengamos un jardín, lo más recomendable es echar el agua sobre la tierra a última hora de la tarde, antes de que oscurezca por completo. También podemos regar a primera hora de la mañana evitando la plena luz del día. Así las plantas no reciben la luz del sol directamente. De este modo el agua no se evaporará rápido y la planta podrá absorber el agua sin problemas.
Tampoco es recomendable mojar las hojas de las plantas cuando las temperaturas son altas y además reciben los rayos de sol porque corren el riesgo de quemarse. Hay que procurar esparcir el agua sobre la tierra y no hacerlo directamente sobre la planta.
Para saber cuándo una planta necesita agua o por el contrario tiene exceso de ella, hay que detectar sus síntomas. Por eso hay que mirar cada cierto tiempo en qué estado se encuentran sus hojas, sus flores y cómo está la planta en general.
Si las hojas no tienen brillo, están amarillentas y se caen, quiere decir que la planta está pasando sed y le falta agua. Por el contrario, para saber si la planta tiene exceso de agua, hay que observar si su color está un tono más amarillo de lo habitual y si a sus hojas les salen manchas. Es más probable que una planta muera antes por exceso de agua que por escasez.
Una buena opción para saber cuándo es el momento de regar consiste en tocar la parte superior de la tierra con el dedo. Si la tierra se queda pegada al dedo es que tiene mucha humedad. Si el dedo sale completamente limpio hay que regar. También hay otros factores que pueden influir en la humedad de la planta como por ejemplo la estación del año y el tiempo de exposición solar.
Por último, si queremos que la planta se desarrolle mejor hay que usar algún tipo de fertilizante. Los fertilizantes o abonos son unas sustancias naturales o químicas que contienen nutrientes. Se utilizan para enriquecer la tierra donde está plantada la planta. Los fertilizantes son como los complementos alimenticios que tomamos nosotros para obtener vitaminas.
¿Y por qué tener una planta? Pues porque las plantas no solo adornan nuestros hogares, sino que también nos aportan otros beneficios. Purifican el aire, ayudan a respirar mejor, reducen el estrés y producen un efecto relajante. Así que si alguno de vosotros no tiene ninguna planta, os animamos a que tengáis una.
Cuando vivíamos en Sevilla teníamos un pequeño pino.
Sí, es verdad. Nos encantaba ese pino.
Cuando vinimos aquí tuvimos que dejarlo allí. La verdad es que nos dio un poco de pena.
Pues sí, es verdad.
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